El infarto agudo de miocardio (IAM) conocido también como ataque al corazón, es la necrosis o muerte de una porción del músculo cardíaco como consecuencia de una isquemia prolongada debido a una obstrucción o estenosis (estrechez) de la arteria coronaria correspondiente.

Sintomas de IC

Las manifestaciones del infarto aparecen de forma súbita, y el riesgo de muerte o complicaciones graves a corto plazo es elevado. Además, la eficacia del tratamiento va a depender, en gran medida, del tiempo transcurrido desde el inicio de los síntomas hasta su administración de los medicamentos.

Las arterias coronarías se pueden estrechar por distintas causas. Las más comunes son un coágulo de sangre y la aterosclerosis (depósito e infiltración de grasas en las paredes de las arterias) que se va produciendo lentamente con el paso del tiempo hasta generar un grado de obstrucción que da síntomas leves o graves como el infarto.

El infarto de miocardio es la principal causa de muerte de hombres y mujeres en todo el mundo. Debido a su alta peligrosidad, el infarto es considerado una urgencia médica. 

  • El infarto agudo de miocardio es la causa número uno de muerte en el mundo occidental, lo que la constituye en un enorme problema de salud pública de trascendencia mundial.

    Existen actualmente diversos estudios con metodologías bien establecidas que realizan la vigilancia epidemiológica de la enfermedad cardíaca. Esos estudios toman como su principal medida el IAM con base en tres elementos: dolor torácico, análisis electrocardiográfico y cambios en enzimas cardíacas.

    El 80% de los infartos de miocardio son prevenibles.

    Dado el impacto poblacional de las enfermedades cardiovasculares, éstas han sido priorizadas por diversos organismos a nivel mundial, entre ellos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) a través del Plan de Global para la Prevención y Control de las Enfermedades No Transmisibles 2013-2020, y a nivel nacional, en la Estrategia Nacional de Salud 2011-2020 , que compromete metas para lograr disminuir la morbi-mortalidad por infarto, aumentando en 10% la sobrevida proyectada a los 12 meses de estos pacientes, así como también aumentar 50% la cobertura efectiva del tratamiento de hipertensión arterial, principal factor de riesgo.

  • Obstrucción de las arterias coronarias, debido a la acumulación de grasa en sus paredes (Arteriosclerosis).

    Coágulo de sangre que obstruye una arteria coronaria, que se ha hecho estrecha debido a una placa de grasa (Atero-trombosis).

    Contracción muscular (miocardio) que estrecha una arteria coronaria e impide el paso de la sangre y que ésta llegue a parte del corazón.

    Enfermedades crónicas de corazón, como las arritmias y la insuficiencia cardíaca.

    Obstrucción de stent por varias causas.

    Enfermedades extra cardiacas como anemia, tirotoxicosis, etc.

  • Los factores de riesgo se dividen en dos categorías: principales y secundarios. Los factores de riesgo principales son factores cuya intervención en el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares se ha comprobado. Los factores de riesgo secundario pueden elevar el riesgo de sufrir estas enfermedades.

    Cuantos más factores de riesgo tenga una persona, mayores serán sus probabilidades de padecer una enfermedad del corazón. Algunos factores de riesgo pueden cambiarse, tratarse o modificarse y otros no. Pero el control del mayor número posible de factores de riesgo, mediante cambios en el estilo de vida y/o medicamentos, puede reducir el riesgo cardiovascular.

    Los factores de riesgo principales son:

    Hipertensión arterial, (Presión arterial alta o mayor a los parámetros establecidos).

    Colesterol alto: la hipercolesterolemia, o más específicamente, la hiperlipoproteinemia, en particular los niveles elevados de la lipoproteína de baja densidad (LDL) y los niveles bajos de la lipoproteína de alta densidad (HDL).

    Tabaquismo

    Diabetes tipo II

    Obesidad y sobrepeso

    Sedentarismo

    Estrés

    Edad

    Herencia familiar.

    Los factores de riesgo secundarios son el estrés, alcoholismo, medicamentos, etc.

  • En la mayoría de ocasiones no se presentan todos los síntomas, sino una combinación variable de algunos de ellos:

    Habitualmente dolor tipo opresivo en la zona del esternón que no se modifica con los movimientos ni con la respiración, bastante intenso y en ocasiones se irradia hacia mandíbula, cuello y espalda, brazo izquierdo, y en algunos casos brazo derecho. Se puede asociar a sudor frío y mareo.

    Otras veces se manifiesta con dolor en la parte alta del abdomen, dificultad para respirar, nauseas (ganas de vomitar) y hasta perdida de la conciencia. El dolor por lo general dura de 20 a 30 minutos en su mayor intensidad.

    El dolor a veces se percibe de forma distinta, o no sigue patrón fijo, sobre todo en ancianos y en diabéticos, siendo en ocasiones sin dolor y aparecen síntomas leves a los cuales se les conoce con equivalente anginosos como, por ejemplo: nausea, dificultad para respirar, diaforesis, etc.

  • Clínico: dolor opresivo referido a cuello, mandíbula, brazos, diaforesis, nausea, etc.

    Electrocardiográfico, alteraciones compatibles con isquemia o no.

    Biomarcadores séricos de necrosis de miocardio: troponinas T e I elevadas o no.

    Otras patologías que causan dolor torácico. Muchas enfermedades pueden causar dolor en el pecho y confundir con infarto agudo de miocardio. Las principales son las siguientes:

    Entre las enfermedades graves que deben descartarse se incluyen la ruptura de aorta, neumotórax, inflamación aguda del corazón (miocarditis), o un coágulo en el pulmón (tromboembolismo pulmonar).

    Ataques de ansiedad.

    Problemas gastrointestinales (cálculos biliares, úlceras pépticas, hernia de hiato, pirosis)

    Asma.

    Problemas que afectan las costillas y los músculos del pecho (lesiones musculares, fracturas, artritis, espasmos, infecciones).

    Espasmos de la arteria coronaria

    Anormalidades del mismo músculo cardiaco

    Hipertiroidismo

    Anemia

    Vasculitis (un grupo de trastornos que causan inflamación de los vasos sanguíneos)

    Exposición a altitudes elevadas (infrecuente).

. Especialista en Arrritmias

. Especialista en Arrritmias

Dr. Xavier Torres-Fonseca
Cardiologo